España es el principal productor y exportador mundial de aceite de oliva, con una superficie dedicada a la oliva de 2,5 millones de hectáreas aproximadamente. Por esta razón el tratamiento del alperujo es clave en el proceso de generación de aceite.
Actualmente hay en torno a 1.828 entidades productoras de aceite de oliva, entre cooperativas y almazaras privadas. De éstas, 908 son cooperativas y 920 son almazaras privadas.
El alperujo se trata de un subproducto de la producción de aceite de oliva obtenido durante el proceso de centrifugado de la aceituna en la almazara, el cual presenta grandes problemas debido a su alta fitotoxicidad.
Las orujeras son las encargadas de revalorizar este subproducto, del cual obtienen aceite de orujo, biomasas; hueso de aceituna y orujillo.
Es evidente que el procesado de alperujo es un eslabón importante de la cadena de valor del sector oleícola, por cuanto permite valorizar los subproductos del proceso, que de actualmente supone un coste para las almazaras y un perjuicio para el medioambiente.
Composición del alperujo
Su composición viene dada de partes de la aceituna pero también con restos del aceite de la misma. Cuenta con una parte más sólida que será el orujo y otra un tanto más líquida que es el alpechín. Entre sus propiedades destaca un alto contenido de agua del 56%. Además cuenta con un PH de 5,4 y ácido. También la materia orgánica es protagonista ya que se eleva con un 91%.
Tratamiento del alperujo y usos
Actualmente el alperujo se recepciona en grandes balsas para aplicarle un proceso físico o químico para la obtención de aceite de orujo.
Después de la obtención del orujo, se pueden obtener subproductos derivados del alperujo. Tras aplicarle un proceso de cogeneración energética o compostaje, se puede usar para:
- Como producción de biomasa
- Para producción de PHB para la fabricación de bioplásticos
- Uso para producción de enzimas y pectinas
- Producción de colorantes y antioxidantes
- Producción de exopolisacáridos de interés comercial para la industria alimentaria y cosmética
- Como fertilizante agrícola.
Otras formas de tratar el alperujo son:
- Métodos físico-químicos: coagulación-floculación, oxidación y procesos electroquímicos.
- Tratamientos biológicos: fangos activados, tratamientos anaerobios y procesos basados en reactores biológicos de membranas. En este caso a de tratarse en poca proporción y realizando mezcla.
Smallops pone al alcance de orujeras y almazaras un sistema para la gestión de alperujo, haciendo uso de nuestras nanopartículas de hierro cerovalente encapsuladas en carbono en los procesos de digestión anaerobia para la generación de biogás de alta calidad a partir del alperujo. Ofrecemos un nuevo modelo de gestión del residuo con capacidad de generar una rentabilidad mayor en el negocio.
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